Tres destinos (y un dato curioso) para los fanáticos de la cerveza artesanal

Al igual que el vino, la cerveza artesanal tiene sus propios destinos donde sus fanáticos pueden disfrutar del sabor, conocer sobre su elaboración e, incluso, visitar plantaciones de lúpulo. Te contamos tres rutas en las que entre sierras, mar y montañas nevadas vas a podés degustarla en sus diferentes estilos.

Villa General Belgrano (Córdoba)

Con un estilo centroeuropeo, las cervecerías artesanales de Villa General Belgrano nos transportan a esos bares alemanes o belgas donde los mozos van de una mesa a otra con bandejas llenas de espumosos porrones. Mucha madera, mesas y bancos de troncos, luz tenue y alguna melodía tirolesa sonando de fondo, hacen el contexto perfecto para combinar un codillo de cerdo o un goulash con una cerveza negra o alguna variedad especial de la casa. Algunas cervecerías también ofrecen visitas guiadas a sus fábricas.

Todo el año es la mejor época para visitar este destino que, además, a muy pocos kilómetros tiene atractivos como El Durazno, Los Reartes o La Cumbrecita. Pero si la idea es disfrutar cien por ciento su impronta cervecera, octubre es el mes indicado. Durante once días consecutivos la Villa celebra la Fiesta Nacional de la Cerveza, la versión argentina del Oktober Fest de Munich en Alemania. Locales y turistas se integran en esta festividad que recuerda la llegada de los inmigrantes alemanes con música, desfiles, trajes típicos, gastronomía y, por supuesto, con una enorme variedad de cervezas que sorprenden por sus estilos y sabores.

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Bariloche y el Bolsón (Río Negro)

Decir Bariloche ya es pensar en la Patagonia Argentina y sus paisajes llenos de lagos y montañas nevadas. Pero para los amantes de la cerveza, tiene un plus especial: la posibilidad de hacer un Beer Tour para conocer las mejores fábricas cerveceras de la ciudad. En un recorrido por tres de las principales fábricas, los maestros cerveceros cuentan sobre el proceso de elaboración para finalizar con una degustación de fiambres ahumados, platos típicos patagónicos y variedades de cervezas.

A poco menos de dos horas, el Bolsón es el lugar soñado para los que fabrican cerveza. Allí están las principales plantaciones de lúpulo, la materia prima principal con la que se elabora esta bebida junto con la malta, el agua y la cerveza. A fines de febrero se realiza la cosecha y es por ese motivo que en ese mes se realiza la Fiesta Nacional del Lúpulo con espectáculos musicales, elección de la reina y puestos con productos regionales.

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Mar del Plata (Buenos Aires)

Conocida como la capital de las cervezas artesanales, en los bares de Mar del Plata se pueden encontrar más de 80 variedades entre Kolsch, Porter, Barley Wine, Pilsen o IPA. También se pueden visitar algunas fábricas y hablar con sus productores para conocer todos los detalles. Ideal para después de un día de playa o de una caminata por la costanera, pasar por las calles Olavarría o Güemes y elegir alguna de las tantas cervecerías para probar la edición limitada de una cerveza de autor que será distinta según la temporada del año.

A media hora, otra ciudad costera seduce a los cerveceros. En Santa Clara del Mar, cada febrero se celebra la Fiesta Nacional de la Cerveza Artesanal y durante poco más de una semana, en coincidencia con los festejos de carnaval, el Patio Cervecero se llena de música, juegos, comidas regionales y alemanas, y cervezas de todo tipo. En esta ciudad costera los productores de cerveza producen desde la bebida hasta sus envases y tapas.

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Santa Fe (Santa Fe)

Como dato extra queremos contarte algo que seguramente te va a sorprender. Es en la ciudad de Santa Fe donde se instaló la primera fábrica de cerveza de la Argentina en el año 1912. Esa tradición cervecera de más de 100 años, convierte a esta ciudad litoraleña en uno de los lugares con mayor cantidad de bares de cerveza artesanal de Argentina.