Ocho carnavales para disfrutar cuando pase la pandemia

En todo el mundo el mes de febrero es sinónimo de carnaval. Distintas ciudades le dan su impronta a esta tradicional celebración que atrae a cientos de miles de turistas deseosos de compartir esta fiesta que, sin dudas, es una de las mayores representaciones de la cultura y creencias populares. Mientras esperamos que las calles vuelvan a llenarse de música y color, les compartimos los principales carnavales de Argentina y el mundo para visitar post pandemia.

Por Argentina

  •  Carnavales de la Quebrada de Humahuaca y Jujuy, cultura ancestral

Con cinco siglos de historia, los carnavales del norte argentino, en Salta y Jujuy, son la mayor representación de la cultura autóctona y los pueblos originarios. Durante un mes se realizan distintos rituales que comienzan con la celebración del sábado anterior al fin de semana de Carnaval, cuando grupos de comparsas llegan a las laderas de los cerros que rodean los pueblos para desenterrar al “diablo”, que fue enterrado al finalizar el carnaval del año anterior.

Las campanitas que forman parte de los trajes que representan al diablo, anuncian con su sonido la llegada al pueblo de las comparsas que recorren la ciudad, mientras los turistas se suman a la caravana, en busca de una “Invitación”, es decir una casa donde sus dueños los esperan en la puerta para servir a todo quien se anime a probar un trago de Saratoga (una mezcla de vino, jugo de frutas). Allí locales y visitantes se mezclan en bailes y juegos donde la diversión es llenar de talco, harina o espuma a los más desprevenidos. El carnaval llega a su fin cuando se realiza el entierro del diablo y las comparsas se pierden nuevamente entre los cerros.  

  • Paso de los Libres, cuna del carnaval argentino

En la provincia de Corrientes, donde la ciudad capital del mismo nombre fue declarada la Capital Nacional del Carnaval, se encuentra Paso de los Libres, cuna del carnaval argentino que realiza esta celebración desde el siglo XIX.

Comenzó siendo una fiesta organizada por los pobladores de la zona y hoy ya cuenta con una importante influencia de los carnavales originarios brasileños. En su corsódromo, se pueden ver desfilar a las comparsas con coloridos trajes y música que invita a bailar.

También llamado el Carnaval de Frontera, Paso de los Libres se divide en dos momentos: El Carnaval Popular, son las comparsas menores y se llevan a cabo durante tres días seguidos; y Carnaval Especial, se lleva a cabo con días de por medio y es realizado por las escuelas de samba más grandes y populares de la ciudad.

  •  25 de Mayo, la ciudad del carnaval

En Buenos Aires se encuentra el Carnaval de la Provincia, título dado al festejo que se realiza en la ciudad de 25 de Mayo. Anunciada como “La Ciudad del Carnaval” cuenta con 3 comparsas, 2 batucadas y 5 carrozas que se presentan cada sábado de enero y febrero en el primer corsódromo a cielo abierto de la región. ´

Al finalizar cada edición se elige la Reina Distrital del Carnaval que representará a la localidad de 25 de Mayo en La Fiesta Provincial del Carnaval donde también se elige su Reina.

Por el mundo

  • Venecia, el carnaval de las máscaras

Durante dos semanas las calles de Venencia (Italia) se llenan de máscaras y trajes de época, haciendo sentir al turista que se encuentra en el siglo XVIII. En aquella época era una fiesta pagana a la que los aristócratas europeos asistían escondidos tras sus máscaras para divertirse junto al pueblo. Prohibida por Napoléon, la festividad volvió a las calles en el siglo XIX y fue en 1979 cuando se declaró como fiesta de manera oficial. Hoy las máscaras blancas, doradas o plateadas, y los trajes de seda negra y colores oscuros, recuerdan la majestuosidad de aquellas primeras celebraciones. Todo en un entorno rodeado por canales y góndolas, en el que los artistas callejeros como tragafuegos, músicos, mimos y malabaristas entretienen al paso.

Un momento imperdible de este carnaval es el llamado Vuelo del ángel que se realiza en la plaza San Marcos. Esta tradición comenzó en el siglo XVI, cuando un acróbata turco subió al campanario de la iglesia de San Marcos caminando por una cuerda desde un barco en el muelle. Años después, la persona fue sustituida por una gran paloma de madera y desde el año 2001 quien baja, con un gran sistema de seguridad es la María elegida el año anterior y adornada con un espectacular traje.

  •  Carnaval de Río de Janeiro, a pura samba

Se dice que este Carnaval de Brasil es el más grande del mundo. Su alegría y colorido recorren el sambódromo día y noche, con comparsas que despliegan toda la belleza de sus trajes y carrozas al ritmo de la danza. El atractivo principal es el gran Desfile de Samba, cuando las doce Escuelas de Samba con mayor talento compiten por el título de Campeona del Desfile. Pero las fiestas y desfiles callejeros son en los distintos barrios son el bonus track para cualquier turista que disfrute de mezclarse entre los locales.

  •  Carnaval de Oruro, tradiciones andinas

Es la mayor fiesta folclórica y religiosa de Bolivia, en honor a la Virgen católica del Socavón. Fue declarada por la UNESCO obra maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad y, desde 2008, forma parte de la lista representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

El circuito de desfile de carnaval se extiende por más de 40 cuadras en las que decenas de agrupaciones con miles de bailarines, músicos y artistas desfilan al compás de danzas típicas como la diablada, la morenada, los caporales, los suri sicuris, los waka waka, entre otros. El Carnaval termina con una multitudinaria procesión final donde participan miles de bailarines y músicos durante más de 15 horas.

Esta gran muestra de tradiciones andinas y populares, incluye también la Gran Peregrinación al Santuario del Socavón con la participación de los 48 Conjuntos Folklóricos vistiendo los más coloridos trajes y mostrando su cultura, patrimonio y tradición. Además se realiza el Convite al Tío y la celebración de la “Challa” de los parajes mineros en las Minas de San José.

  • Carnaval de Barranquilla, fiesta multicultural

La música popular, los bailes y el folclore son el marco para hacer de esta fiesta popular la más grande de Colombia. Su principal característica es la diversidad como motivo de celebración que alienta el arte popular y mantiene vivo el pasado. Sus calles se llenan de pobladores disfrazados con trajes que invocan todo tipo de especies animales, nativas y extrañas; negros africanos; cabezones; dementes; muñecotas; superhéroes; seres mitológicos, entre otros. La sátira es la principal protagonista.

La Batalla de las Flores, la Gran Parada y el Festival de Orquestas, son algunos de los atractivos de este carnaval que, por su variedad y riqueza cultural, fue reconocido como Patrimonio Cultural de la Nación y declarado Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad por la UNESCO.

  • Mardi Gras en Nueva Orleans, entre collares y jazz

Literalmente la traducción del francés de Mardi Gras significa “Martes Graso”, pero es tradicionalmente llamado “Martes de Carnaval” ya que es el día más importante de toda esta celebración por ser el desfile que tiene lugar antes del miércoles de Cenizas.

Las festividades ganan las calles de esta ciudad ubicada en Luisiana (Estados Unidos), llenándolas de colorido y música, entre la que no puede faltar el jazz. Son muchos los desfiles que se realizan en distintos barrios, pero hay tres que destacan: Baco, Endimión y Orfeo. A su paso, desde las carrozas se tiran todo tipo de regalos a los espectadores: como juguetes y peluches. Pero son los collares los que atraen la atención de los espectadores que se entusiasman en atraparlos y así llevarse consigo uno de los símbolos más codiciados de este carnaval.

 Con o sin pandemia la vida, como decía Celia Cruz, ¡es un carnaval!